lunes, 8 de septiembre de 2008

CORAZON

Por mucho pedí no te fueras de mi lado, pero no fue suficiente, hoy recibí tu nota de despedida, aseguro y juro que sentí como partiéndose en dos mi corazón estaba implorando no le dejaras solo, ya que el mismo no era capaz de llevar esa carga…

Y me asuste mucho, dejo de latir por un momento, el cual que se me hizo eterno, sentí un ardor tan profundo en mis entrañas que pensé ardería en llamas, el y yo inevitablemente en algún momento moriríamos…

Intente decirle a la razón que se hiciese cargo de el y de mi por ahora, mas era tarde ya, ella también estaba carcomida y su dolor en melancolía se había trasformado, quebrada estaba, no quedaba mucho entonces…

Tome mi poca cordura ya que debo confesar me desquicie y salí corriendo a gritarle, a cuestionar al mar por que me hacia esto…
No tuve la respuesta que hubiese deseado, tan solo el silencio de mi ya anunciada soledad…

Para cuando caí en la cuenta de lo que en mi pasaba, toda yo y mi sistema, se había sumido en un inmenso temor de no saber como enfrentaría ahora esa vida que frente a mi me pedía, me exigía una reacción; me sostuve un momento y reuniendo un poco de aplomo, logre regresar a casa…

…Por que de pronto todo me quedaba tan grande, tan inmenso, tan vació… esta sobre cama no le venia bien a mi y no emitía el calor de antes, la cordura ahora deteriorada sabia que mi corazón se rehusaba a sentir mas, a seguir latiendo, a tener que sobrevivir un día mas, ahora ya sin ti…


CORAZON: Se que estaremos solos por un tiempo hasta que este sentimiento sea uno de esos recuerdos que ya no duelen ni al recordarle en alguna noche de luna llena, así que es deber nuestro limpiar el rostro de lagrimas derramadas, pintar un mejor paisaje y ver que se puede hacer, pensar y sentir poco o mucho por nosotros dos y mas nada, sacar fuerzas de lo caído y pensar que un hoy nos espera, no pensemos mucho en el mañana, me parece mejor un hoy, poco a poco, día a día, juntos y tratando de reconciliarnos con el mar que nos ha llevado lejos lo que tanto amábamos…


No hay comentarios: